domingo, 15 de octubre de 2017

Soledad

Soledad. Cruzas y más soledad.
La nada más profunda.
De las calles de la ciudad solo se lleva las almas perdidas, vacías, sombrías, como la suya.
Miedo. Fantasmas. Inseguridades. Ella está compuesta por ellos.
Un día se miró en el espejo y se perdió entre el reflejo de una chica menuda, de una cabellera rojiza, rebelde. El reflejo de una chica delgada, hasta el extremo, de cicatrices físicas pero sobre todo internas. De mirada triste, de ojos oscuros y perdidos.
Ahí en ese espejo destartalado se perdió. En aquella habitación que era su jaula, caótica como su corazón roto a pedazos.
Y salió a la calle. Igual de perdida, igual de sola. Con la soledad en la mirada recorrió la ciudad, vacía.
Entre todo el gentío de aquella ciudad bulliciosa su alma triste vagaba y acabó perdida entre callejuelas que le mostraron la realidad: otras almas perdidas, rotas por el paso del tiempo se encontraban. No estaba sola. Solo tenía que reaccionar.
Un día decidió dejar de vagar y abandonar aquella ciudad de almas vacías. Cogió su maleta y huyó lejos de ahí.
Posiblemente no fue la decisión más valiente, pero sí la más acertada.
Huir de lo que le mataba fue el remedio para empezar a sanar.
Huir de su jaula y volar. Porque de aquellas cicatrices brotaron unas alas que le hicieron volar alto. Que le ayudaron a dejar de sentirse atrapada.
De aquella ciudad sí que se llevaba algo. Se llevaba todas las batallas que había perdido pero que la habían hecho más fuerte.
Si la buscáis probablemente no la encontraréis. Se ha ido lejos y ya no es la misma que os encontrastéis perdida. Si os dan miedo las mujeres fuertes, ella os asustará. Pero si la buscáis solo hace falta que sigáis su rastro de pasión, de fortaleza. Ahí la encontraréis. Seguro que bien dentro de vosotros sabéis quién es.

viernes, 8 de septiembre de 2017

Revolución

La brisa mantenía el estado de calma. Todo se mecía ante ella, las hojas de los pequeños árboles plantados en el jardín, las conchas colgadas de un hilo que decoraban el porche, las olas de aquel infinito mar que coronaba su vista.
Desde la ventana Claire observaba, inmóvil, como todo se mantenía en calma aunque en su interior había mil tormentas.
Unas tormentas que cada día se alimentaban de los gritos que provenían del comedor o de los cortes, ya antiguos, que llevaba en sus muñecas, y de sus ojos, secos porque ya no le quedaban lágrimas.
Pero ese día, después de ver como todo se mecía por la brisa marina de aquel idílico paraje en el que vivía, se despegó de su ventana y bajó las escaleras, cruzó el porche entablonado y corrió hasta la playa.
En el momento que sus pies tocaron el agua, tan fría que la hizo estremecer, de ese infinito mar, una lágrima rodó por su rostro hasta caer entre las olas.
Todo empezó ahí.
Sus tormentas empezaron a curarse.
Todo empezó de nuevo.
Esta vez sería una revolución.
Su revolución.

jueves, 27 de julio de 2017

Mis términos

Me redefino,
Impongo mis términos.
Caótica,
Apasionada,
Cada paso lo doy con pasión.
Cabezona,
Nunca cambiaré de opinión,
Creo firmemente en mis ideales,
En mis términos.
Me redefino.
Pero nunca dejo de encontrar,
En la escritura el poder de crear vida y de dar vida.
En el filtro rosa que envuelve la vida, porque todo es más bonito si tiene color.
Me redefino
E impongo mis términos.
Mis normas.

miércoles, 21 de junio de 2017

Decisiones

Tomar la decisión,
¿quedarse contra todo pronóstico o irse?
Tomar la decisión,
de ser cobarde,
de quedarse por comodidad,
por miedo,
a fallar,
a la soledad,
a perder lo que un día te hizo feliz,
pero que hoy mata,
rompe,
no te da la vida.
Tomar la decisión,
de huir,
de emprender el camino más difícil,
menos cómodo,
más valiente.
Emprender el vuelo,
y huir de lo que te consume,
te deja a medias,
no te da vida.
Tomar la decisión,
¿te quedas, viviendo una vida a medias o vuelas y empiezas a vivir?

jueves, 18 de mayo de 2017

Declaración de intenciones

Declararme fiel,
a mí misma,
a mis principios.
Declararme dueña,
de cada paso que dé.
Dueña,
de mi destino.
Declararme amor,
propio.
Aferrarme.
Salvarme.
Encontrar.
Y nunca jamás dejar de buscarme.
Esta es mi declaración de intenciones.

jueves, 20 de abril de 2017

Mar

Quietud,
silencio entre las olas.
Un faro a lo lejos,
indica tierra firme.
Lejos.
Entre escoger la fiereza de las pasiones terrenales
o la quietud eterna del mar,
me quedo con el mar.
Puro.
Digno.
Fiel.
Me quedo con el mar,
infinito.

jueves, 6 de abril de 2017

Nuevo comienzo

Apaga la luz,
no vaya a ser que quieras volver,
que entre todos los atardeceres
le encuentre sentido al pasado,
y retorne a nuestros amaneceres.
Apaga la luz,
cierra la puerta.
Para que no vuelva más,
para que el pasado se quede en paz,
que empiece nuevos amaneceres,
pero sin repetir viejos patrones.
Apaga la luz,
cierra la puerta.
Amanece,
es un nuevo comienzo.