A Contracorriente Prólogo

Mi historia es complicada, se podría escribir un libro con ella, un libro o más de uno...Todo empezó con mi nacimiento y entonces todo ha sido vivir el día a día, a contracorriente...

Me llamo Alexandra, tengo 15 años, soy de procedencia Israelí y Francesa, mi madre nació ahí y de pequeña se mudó a París, donde con 16 años conoció a mi padre. Ahí empezó todo.

Mi madre siempre ha sido una mujer muy centrada, responsable de sus dos hermanos pequeños desde que tenía 13 años, una mujer fuerte, a la que no le he visto llorar nunca. Dicen que me parezco a ella mucho, pero no me veo parecido, ella es, como casi todas las mujeres de Israel, de tez aterciopelada, cabellos negros como el carbón y ojos con forma de avellana, y de color caoba. De pelo rizado y muy largo, alta y muy delgada. Desde pequeña siempre la he admirado y desde el accidente aún más. De ese fatidico accidente del que no soy capaz ni de hablar...

Mi padre. es mi padre, francés por naturaleza, alto y muy rubio, de carácter fuerte y muy estricto, tez blanca y ojos redondos y verdes. Su accento es exiquisito y supongo que enamoro a mi madre lanzandole esas miradas que solo él sabe lanzar. Siempre ha sido mi heroe y el principe de todas mis batallas. El que curaba los miedos con un beso al despedirse. Él es mi padre.

Mi historia empieza con el amor adolescentes de mis padres, cuando de repente mi madre con solo 16 años se quedó embarazada de mí y fue la deshonra de toda su familia... Mi historia empieza un 7 de Junio de 1997 en una ciudad francesa, llamada París. En la habitación de un pequeño hospital, una pareja de jovenes enamorados entraba por primera vez, porque la mujer iba a dar a luz a una niña... Una niña a la que decidian poner Alexandra Marie, una niña que representaba que iba a nacer sana. Aunque hubo complicaciones en el parto y esa niña estuvo casi un minuto sin aire... Esa niña que lloró minutos más tarde, esa niña que no dejaron ver a sus padres hasta tres horas de vida, esa niña de pelo negro y ojos verdes, esa niña que necesitaba cuidados especiales de pequeña, esa niña soy yo...Me llamo Alexandra Marie François Keilan, y a partir de este momento te adentrarás en mi historia. ¿Estás preparado?